De Picadillo y Sarabanda

Hoy salí a correr de nuevo por la vereda.

Me saqué un buen de ampollas, pero pues no me puedo quejar comparando este día con el que tuve ayer. Y no estoy seguro bien de que era o que pedo... en mi trayecto voltee hacia atrás y vi entre la hierba a un hombre boca-arriba tirado, con una mano sobre el pecho y la otra de lado. No le dí mayor importancia y seguí corriendo mientras pensé -Si esta pedo (cosa rara, pues aquí casi no hay cantinas [notese el sarcasmo]), cuando venga de regreso ya no va a estar ahí o va a estar en otra posición. Sí esta muerto, va a seguir igual (porque la neta ni se veía que respirara el hombre)

Puta, se me olvidó pasar a verlo de regreso.